VOCES DE ACANTILADO
Fotografía David Orias – Ocean
Cuando el mar alborota su espuma entre las piedras
y la noche destiñe las aguas plateadas
Cuando el sueño recoge los placeres que se hunden
en los deseos puros de las profundidades
en el momento justo del buceo elegido
Cuando las sombras yacen sus líquidos marinos
y son centro y entrada del suspiro en la brisa
entonces, navegamos al son de las palabras
y hundidos tras la sonda, profanando el abismo
en esas sensaciones del gozo subterráneo
nos embriaga en cascadas el embate del viento
y en bonanza, a la orilla, en neptúnea caricia
exhalamos las luces esbeltas de la noche
Cuando nadie nos mira nos arrastran las olas
modelando en los torsos, juegos de fantasía
entonces lo salobre se vuelve dulce, grato
como arroyo que corre por un huerto de almendros
Es el temblor del agua que entre rocas labradas
sube, baja, nos mece, retrocede, regresa
y nos lleva al silencio de bonanza en remanso
Cuando el acantilado silba sus gritos blancos
nuestro numen acuoso retumba en el poema
bullir de sensaciones, todo es negro y las luces
las creamos nosotros, cuando nos entregamos
a esta emoción sublime de amor que es poesía…
©Julie Sopetrán
Eltiempohabitado's Weblog 
Gracias Marieli, me alegra saber que te gustó este poema. Un beso fuerte.
«cuando nos entregamos
a esta emoción sublime de amor que es poesía…»
Sublime navegar en estas aguas versadas que tanto evocan y provocan. ¡Magnífico! Un abrazo
Hermoso poema. He nacido a orillas del mar y salvo en contados momentos de mi vida, siempre he vivido en sus orillas (aun cuando me fui durante seis años a otro país, esa fue mi elección: otro mar, sí, pero mar al fin). Tu texto me hizo recordar un fragmento de una novela que dice así:
«Me gusta el mar. Esa vasta extensión de agua que a veces se ve tan tersa que uno tiene la sensación de que se podría caminar sobre ella y que a veces se agita y se encrespa como si un fuego interior lo obligara a hervir y esa furia lo incitara a golpear las rocas de la costa levantando nubes de espuma blanca, con sonido crepitante de lluvia menuda forzada».
Un abrazo.
Gracias a ti, y a todos los que han comentado. A todos Felices Pascuas! Y mi cariño y agradecimiento.
Tan hermoso Julie…tan hermoso!
Encantador, Julie.
Mis abrazos.
Una preciosa alegoría al mar, a sus olas, y siempre a su belleza. Un abrazo.
Hermosas letras Julie ,es una danza, al atardecer,de un día acabado , uno nuevo por nacer,en estrofas colmadas de amor.Un abrazo para ti.
Es el amor poético, puro, en cada verso;
es el amor a la palabra que nace y renace de tus más profundas sensaciones;
es , como bien dices , «la emoción sublime de la poesía».
Mi querida Julie, admiro el magisterio de tu arte y su belleza.
Un gran abrazo.
estupenda reflexión!
Bellísimo poema, maestra.
Me congratula tu numen prodigioso.
Un abrazo.
Le notifico que ha sido premiado con el «Award Great Blogger» Otorgado por el resto de blog. Enhorabuena.
https://antoncaes.wordpress.com/2016/03/17/por-fin/
No creo que haya una mejor manera de expresar éste cúmulo de emociones,
Esto es poesía
Me gusta mucho
Besos Julie
Un gusto leerte siempre
Deslumbrante!!!
Gracias siempre. Un abrazo muy grande.
Ramón
Y las luces las creamos nosotros… Precioso, Julia. Un abrazo.
Muy hermoso. Muy sensual como el vaivén de las olas. La foto me gusta mucho y le va estupendamente. Un beso amiga.